Siempre me pregunto a mí misma,¿por qué quiero morir? Y lo cierto es que ni yo misma me entiendo, me siento sola, tan sola.Me he desnudado en cuerpo y alma ante muchos hombres, pero seguía sintiéndome así. Y ahora ya no tengo esperanza por nada ni por nadie, los días avanzan, vivo la misma rutina esperando y esperando.
Y ya me cansé de esperar que algo dentro de mí cambie, sé que no soy indispensable en este mundo ni en la vida de familia o amigos. Nadie nace para ser indispensable, sé que no soy nadie ni valgo nada. Pero quiero serlo, quiero sentirme bien, quiere dejar de estar triste, quiero ser necesaria e indispensable para alguien.
Es sólo que ya no tengo fe, pasé por tanto que ya no quiero nada más.