Hola, ésta página es una maravilla, en verdad tengo una necesidad de atención muy fuerte pero siento que no puedo confiar en nadie que conozca, me molesta que la mayoría de la gente en vez de escucharte quiere darte siempre un consejo, elaborar un juicio, ¡yo misma lo hago! Por eso titulé a este texto ambivalencia, es como si fuera personas distintas a cada momento, estoy yendo a terapia y a veces me siento muy bien pero a veces quiero abandonar todo y quitarme la vida, en verdad no lo he intentado, solo hago imagenes en mi mente y por momentos estoy muy segura de querer hacerlo, con todo mi lado responsable de la vida me dice que debo intentar cerrar ciclos de la mejor forma que pueda, así que ya me alejé de mi familia, estoy terminando una relación de 7 años con un hombre al que amo profundamente pero al que definitivamente ya no quiero hacer sufrir más. Analizando mi vida me doy cuenta de que he sido rechazada desde el inicio, mi padre golpeaba a mi madre cuando yo estaba en el vientre, después mi madre ingirió medicamentos para abortar, a los 5 años un niño intento asesinarme y a los 10 sufrí un abuso sexual, eso aunado a un rechazo general a lo largo del tiempo, clichés como ser golpeada por otros niños, ser marginada, discriminada, burlada.. cosas que ocasionaron en mi una timidéz e inseguridad extremas. Sé que no es lo peor que le puede pasar a una persona pero es lo que me ha pasado a mi y no tengo más parámetros de dolor. No se disfrutar las cosas buenas, recientemente alguien me dijo que imaginara los 10 mejores momentos de mi vida y a mi mente solo acudieron momentos malos. La gente habla del suicidio como una cobardía, te dicen cantidad de adjetivos que van de lo discreto a lo brutalmente ofensivo. Yo pienso que el suicidio puede ser una respuesta si es lo que en verdad se quiere, y que es digno de respeto pues también se necesita valentía para ejercerlo. Creo que se le debe tomar en serio como una decisión de vida, no de muerte, tratar de no dejar cosas pendientes, dejar incluso un varo para no causar gastos aparte de las inevitables molestias emocionales y físicas. Y ¿porqué no? disfrutar los pocos momentos que se puedan en el proceso. Obviamente no pienso siempre así, hay momentos en los que el dolor es tan agudo que se nubla mi entendiemiento, pero dejo que pase, trato de que pase, y aunque no se quita pues ese dolor se clava en el cuerpo, trato de tener serenidad para construir un suicidio hermoso, creo que también puede ser una obra de arte y estar cargado de impresiones bellas. A lo largo de mi vida he aprendido a rendirle culto a la tristeza y la soledad y de echo ya me siento bastante muerta, desgraciadamente las implicaciones físicas y económicas me recuerdan que no es así jaja. Espero este escrito sirva a alguien de identifiación, sería muy valioso para mi saber que no soy la única que siente esto. Saludos a todos!