Querido papá:
Sé que es extraño que veas está nota aquí, en medio de muchas otras historias llenas de sufrimiento y miseria. Pero es un espacio en el que me siento cómoda para dejarte mi último mensaje.
De seguro estás triste por la decisión que tuve de suicidarme pero quiero que sepas, primero, que no es tu culpa, no había nada que pudieras hacer para evitarlo, la del problema soy yo.Sé que esta opción que tomé es de cobardes, pero no me importa, de todos modos siempre he sido una cobarde.
Estoy harta de vivir con dolor, con esta terrible enfermedad, con este estrés.
Estoy harta de ser un estorbo para tí, de ser tan estúpida como para creer que yo sola podía con mis problemas... Sé que desde qué murío mi mamá yo he sido una larga cadena de decepciones y que nunca voy a superar a mi hermano.
Sé que nadamás desperdicias el dinero en mí... Y te juro que intento mejorar, pero no soy nada.
Cuídate mucho por favor, no te olvides de comer bien y de hacer más ejercicio, de cuidar tu salud.
Cuida mi hermano, ambos sabemos que después de esto se va a cerrar, pero no lo abandones y quédate con el, (¿Sabes que te amo mucho no?)
Una vez más... No te culpes.
Los amo mucho y espero algún día me perdonen.