Me atrevo a definir mi vida como algo normal. Evitando detalles incensarios de mi pasado, actualmente tengo una familia sana y buena (tanto en lo físico y biológico como en lo psicológico y social), que si bien en principio eran algo despreciables y dañinos para mí forma de ser, hoy en día nuestra relación está mejor que nunca, conseguimos entendernos un poco mejor y aceptarnos tal cual somos. En el ámbito académico me encuentro cursando primer año de Literatura y lingüística en una de las universidades más prestigiosas de mi país, la carrera me gusta, siempre me ha gustado el adquirir conocimiento. En tanto a mi vida social, si bien no tengo amigos completamente cercanos sé que no estoy sólo; además tengo una novia increíble, con la cual llevamos para el día de hoy una relación tranquila, sin toxicidad, problemas o peleas.
A simple vista mi vida es ideal, tengo una buena relación con mi familia, una pareja, un par de "amigo@s" y estudio algo que me gusta en una buena institución... Sin embargo sigo sintiéndome decaído, sigo sintiendo ese peso, esa manta enorme sobre mis hombros que cada día se torna más pesada, me impide salir adelante, pone en riesgo mis calificaciones, mi relaciones sociales y a mi mismo. Me tengo mucho rencor a mi mismo por no poder ser "feliz" con personas que realmente tienen problemas ¡a mi me pasa ninguna mierda y mi ánimo, ganas y autoestima están hechos mierda!
Siento que soy un egoísta total, soy tan consciente del sufrimiento que implica la existencia dentro de la sociedad que se ha establecido por nuestra "raza" (humanos) que eso me impide disfrutar sin que importe el verdadero trasfondo y sin sentido de todo lo que hacemos.
He estado llendo a psicólogo y psiquiatra últimamente (por insistencia de mi pareja en qje buscara ayuda) porque está maldita sombra comienza a ganarme la batalla, he probado con dos medicamentos distintos, ninguno surtió efecto alguno más que revoltijo de estómago mientras mi organismo se acostumbraba a ellos. Muchas veces me he cuestionado si realmente importa el vivir o el sí quiero hacerlo, sinceramente yo no quiero; pero hay más personas, personas a las que sí aprecio y quiero que sufrirían demasiado si hiciese caso a mis deseos, sé que muerto no sabría de su sufrimiento, dejaría de existir y no sentiría remordimiento, pero la empatia que tengo me impide el no tener escrúpulos y no pensar en el sufrimiento ajeno.
Hoy he vuelto a pensar en acabar con esto, en el cajón quedan 15 pastillas para el resto del mes y se me ha pasado por la mente el ingerirlas... No lo hice, no lo haré.
Es duro leer como hay gente que ha pasado mierdas y sufrimientos horribles, pensar en la agonía que sintieron cuando leo algunas de sus anécdotas y en lo mal que deben estar ahora, y que yo que no tengo problema alguno esté sintiendo ese mismo pésame me hace darme asco, me hace sentirme la persona más egoísta del puto mundo.
Jamás creí que acabaría escribiendo esto en un foro.